El templo que acoge la imagen de la Patrona de la Diócesis de Canarias, declarado en 1976 Monumento Nacional, ofrecerá una visión nocturna más ornamental, gracias a Red Eléctrica. 

El Ayuntamiento de Teror y Red Eléctrica de España han firmado un convenio de colaboración para dar iluminación exterior al templo de la Basílica del Pino, uno de los edificios más importantes del Centro Histórico de Teror. 

El alcalde de Teror, José Luis Báez, la directora general de Transporte de Red Eléctrica de España y la delegada en Canarias de Red Eléctrica de España, Eva Pagán y Ainara Irigoyen, respectivamente, han firmado este viernes , en presencia del consejero de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias, Pedro Ortega, del director de Infraestructuras de Red Eléctrica en Canarias, Daniel Pérez Varela, y del párroco de la Basílica del Pino, Jorge Martín de la Coba, un convenio por el que la compañía eléctrica abonará los costes de ejecución del proyecto de iluminación exterior de la Basílica de Teror, valorado en 68.000 €.

El templo de Ntra. Sra. del Pino, declarado Monumento Nacional en 1976, es uno de los más significativos de Canarias, tanto por albergar la imagen de la patrona de la Diócesis de Canarias y ser centro de peregrinación, como por su arquitectura y patrimonio artístico. La iluminación del edificio responde al interés del Ayuntamiento de Teror de poner en valor uno de los principales recursos patrimoniales y turísticos del municipio, y adecuar las instalaciones lumínicas del Casco de Teror para dar mayor realce a los edificios y lugares emblemáticos del Casco de Teror.

En el acto de firma del convenio, el alcalde de Teror manifestó su agradecimiento a Red Eléctrica por hacer realidad la ejecución de este importante proyecto, y al Gobierno de Canarias por su apoyo, “confiando en que sea el primero de otros que puedan llegar en el futuro para dar iluminación ornamentar a distintos monumentos y espacios del Casco de Teror, como la Plaza del Pino, la Plaza Teresa de Bolívar, la Calle Real, el Palacio Episcopal o la Plaza de la Alameda Pío XII”.

El proyecto de iluminación exterior de la Basílica, que se ejecutará en los próximos meses a través de Red Eléctrica, permitirá un control de la iluminación ornamental del templo, estableciendo una relación directa entre su entorno y valorando los puntos de mayor interés que posee el edificio. La propuesta elaborada por la Fundación Santa María la Real del Patrimonio Histórico, especializada en este tipo de proyectos, contempla una iluminación suave, de detalle, que destaque unos elementos sobre otros, huyendo de iluminaciones planas sobre el conjunto del edificio. En su mayoría se utilizará tecnología LED y se combinarán distintas temperaturas de color en función de los parámetros a iluminar (torre amarilla, gárgolas, zonas enfoscadas, elementos vegetales, cúpula, etc).

Red Eléctrica cuenta con distintas instalaciones eléctricas de la red de transporte en el municipio de Teror y está interesada en colaborar en proyectos de interés social promovidos por el Consistorio, de acuerdo con su compromiso de sostenibilidad que incluye medidas de apoyo a las localidades en las que la compañía tiene infraestructuras

El actual templo que acoge la Basílica del Pino fue construido entre 1760 y 1767, a cargo del arquitecto Antonio de la Rocha, convirtiéndose en el centro neurálgico de la Villa de Teror, como santuario mariano. El edificio ha sido sometido a lo largo de su historia a varias restauraciones, y en esta ocasión se realizará por primera vez una intervención de la iluminación exterior adecuada a la magnitud del edificio.

Aunque el origen de Teror, como núcleo de población, puede remontarse a épocas anteriores a la conquista de Gran Canaria a finales del siglo XV, su configuración y desarrollo surgió a partir de esta época, unido a la aparición de la imagen de la Virgen del Pino y a la necesidad de buscar asentamientos agrícolas en tierras fértiles y con abundancia de aguas.

A principios del siglo XVI Teror contaba ya con una ermita o iglesia de Santa María de Therore, que acogería la imagen de la Virgen María aparecida en un pino a finales del siglo XV. Sin embargo, es probable que Teror contara ya con una ermita anterior en San Matías, en las inmediaciones del convento de las Dominicas, que desapareció en 1752.

El primer templo que acogió la imagen de “Santa María de Therore” fue aquella pequeña y sencilla ermita, de la cual se tienen noticias sobre su existencia desde el año 1514, y de la que sólo se conserva su pila bautismal de piedra compacta de color rojizo.

En 1600 se inauguró el segundo de los templos, una iglesia de tres naves y de estilo mudéjar a la que se le irían añadiendo otros elementos como la sacristía, el coro, órgano, o la torre amarilla, uno de los pocos vestigios que se conservan de esa construcción, en servicio hasta 1760, fecha en la que se inició la construcción del actual templo, manteniendo la torre del Campanario como eje de la nueva planta del tercer templo, pero sin coincidir con la segunda construcción.