El Gobierno de Asturias ha desvelado un ambicioso proyecto de innovación digital destinado a impulsar la extensión de la tecnología IoT en el medio rural. Este sistema facilitará la conexión e intercambio de datos entre dispositivos electrónicos de forma inalámbrica, acercando el concepto de ciudades inteligentes (Smart cities) a los pequeños concejos asturianos (Smart villages).
El proyecto, denominado como “Nodo Smart Cities e IoT en Asturias”, es una iniciativa público-privada que cuenta con la participación de 16 empresas tecnológicas pertenecientes al Clúster TIC y del Ejecutivo autonómico, a través del órgano Gestión de Infraestructuras Públicas de Telecomunicación del Principado (Gitpa).
A través de la tecnología LoRa, la cual permite conectividades inalámbricas en alcances de hasta 20 kilómetros, la iniciativa contempla el desarrollo de aplicaciones prácticas que permitirán, por ejemplo, monitorizar el medioambiente y optimizar el trabajo en el sector primario o la asistencia a las personas mayores.
El funcionamiento es sencillo. La red necesita una antena que facilite la señal y una serie de emisores inalámbricos interconectados que recibirán y procesarán datos recibidos a través de sensores. Se trata, en definitiva, de conectar dispositivos o máquinas y permitir que intercambien pequeñas cantidades de datos a baja velocidad.
Las aplicaciones son múltiples y en distintos ámbitos de relevancia. Por ejemplo, serán de gran utilidad en lugares con poca cobertura que precisen una conectividad a distancia, como en una explotación ganadera, donde permitirán geolocalizar a los animales o monitorizar si salen o entran en un cercado. También abre nuevas posibilidades en el sector agroalimentario, ya que permitirá controlar, a través de sensores, parámetros como el grado de humedad, luminosidad o las condiciones ambientales de las explotaciones. Otras de sus aplicaciones son el control medioambiental de la calidad del aire o del agua o de diferentes servicios públicos en las ciudades inteligentes.
Esta iniciativa forma parte de un plan más ambicioso que ya ha dado sus primeros pasos con el proyecto piloto Yernes y Tameza 2.0, que tiene por reto convertir este municipio en un concejo inteligente. El programa se apoya en la innovación para gestionar los recursos de una manera más adecuada, tanto para el medio ambiente como para las personas.
Así, en el proyecto de Yernes y Tameza los sensores se utilizarán para monitorizar la calidad del aire, del agua y de la tierra, como para controlar el consumo energético, la cabaña ganadera o los movimientos de la fauna salvaje. El concejo será también el primero en el que se desarrollará uno de los planes piloto de la compañía Cellnex Telecom, que se centrará en aplicar la tecnología IoT a la atención social, incluyendo un botón de emergencia para personas mayores.
Será en este municipio donde comience la red de IoT del Principado, mediante la instalación de antenas aprovechando las torres de televisión digital terrestre (TDT). El objetivo del Principado es extender este modelo a otros territorios de la mano de la Federación Asturiana de Concejos.
Fuente de imágenes: Principado de Asturias