La junta de gobierno municipal de Gijón aprobó el 21 de julio la salida a licitación del proyecto para la renovación integral del alumbrado público en el barrio de La Arena. El Servicio de Obras Públicas ha diseñado los pliegos con un presupuesto base de 1.039.942 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de cinco meses.
Se llevará a cabo la obra civil en numerosas calles del barrio de La Arena para sustituir las viejas farolas de vapor de sodio, muchas de ellas ancladas a las fachadas de los edificios, por otras nuevas que se instalarán sobre las aceras e incluirán bombillas LED de 50 watios.
Los nuevos puntos de luz incluyen una columna de 4,30 metros de altura y unas luminarias con forma de globo del modelo Gijón equipada con esta tecnología LED que en comparación con el sistema de alumbrado anterior ofrece mayor eficiencia energética, menor consumo eléctrico, menores costes de mantenimiento y menores emisiones de CO2.
Los pliegos plantean la renovación de unas 275 luminarias, incluyendo la ampliación de la calle Ezcurdia desde la calle Piles hasta Menéndez Pelayo, y Emilio Tuya desde la calle Doctor Aquilino Hurlé hasta Menéndez Pelayo, ampliando incluso el ancho de aceras. Las calles Piles y Marqués de Urquijo dispondrán, tras la actuación para renovar el alumbrado, de dos aceras de 2 metros y calzada de 8 metros. Las calles Caridad, La Playa, Canga Argüelles y Emilio Tuya en su tramo desde la confluencia con la calle Canga Argüelles hasta la avenida de Rufo García Rendueles también se renovaran, con unas aceras que tendrán 2 metros a cada lado y la calzada 7 metros.
Según Manuel Arrieta concejal de Mantenimiento Urbano, la instalación de los nuevos puntos de luz implicarán en algunos casos, pérdidas de algunas plazas de aparcamiento. Por su parte Tita Caravera presidenta de la asociación de vecinos de La Arena, recordó que estas obras eran una antigua demanda de los comerciantes y vecinos de la zona. «Somos un barrio muy oscuro en algunas de nuestras calles. Tenemos una iluminación muy pobre …….. porque las farolas están muy altas y las luminarias son muy antiguas. Además, el contraste es mayor por la cercanía del Muro, para mí iluminado en exceso, y de una calle tan comercial y visible como Marqués de Casa Valdés.