El pasado lunes 21 de septiembre, una coalición de 40 organizaciones industriales, entre las que se encuentran Lighting Europe enviaron una carta a dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, donde solicitaban una acción decisiva para resolver los problemas de implementación de de la Directiva Marco de Residuos de la UE (Waste Framework Directive-WFD), específicamente la base de datos de sustancias de riesgo en productos (SCIP)
Los firmantes que representan una parte muy significativa de la Economía europea solicitan una resolución urgente de problemas de implementación en una base de datos diseñada para respaldar la economía circular tal como se expresa en el Pacto Verde Europeo. Esta base de datos SCIP es requerida por el Artículo 9.1 de la actualización directiva marco de residuos.
Los firmantes de esta carta solicitan a la presidente Von der Leyen que tome medidas inmediatas para:
1. Posponer el plazo de notificación del SCIP del 5 de enero de 2021 al menos 12 meses después que se finalice la base de datos;
2. Realizar un estudio sobre la utilidad, viabilidad, proporcionalidad e impacto de la base de datos y;
3. Instruir a la Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos (ECHA) para que adapte la base de datos SCIP según al resultado de dicho estudio.
La ECHA no pudo finalizar el desarrollo de la base de datos en el plazo requerido: enero de 2020, lo que complica que las empresas puedan desarrollar, probar y adaptar sus propios sistemas para cumplir con la notificación a enero de 2021 como fecha límite.
Los signatarios tienen serias preocupaciones con respecto a la viabilidad, proporcionalidad y valor del base de datos SCIP, expresada repetidamente durante los últimos dos años, pero sus preocupaciones no han sido resueltas por el Comisión Europea, ni por el ECHA.
Contrariamente a los principios de la UE para la mejora de la legislación, el artículo 9.1 se añadió a la DMA revisada durante la última etapa del proceso de codecisión sin ninguna consulta previa a las partes interesadas o evaluación de impacto.
Un estudio de impacto adecuado debería ayudar a definir el camino a seguir para cumplir la ambición de la UE de una Economía Circular Europea.